Cuando todos los asistentes llenaban la mítica Sala Apolo, las luces de la discoteca se apagaron y dieron paso a una proyección. En el vídeo se mostró una organización para apoyo a Ucrania, creada por la ganadora de 2016, Jamala, que fue la encargada de abrir el evento con su canción "1944". El eterno debate, si Eurovisión es política o no, marcó la fiesta y sin duda marcará toda esta temporada.

Jamala durante su actuación de "1944" en la Sala Apolo / Fuente: Andrea Asmarats

Y después de Jamala y de la ovación de todo el público, el maestro y la maestra  de ceremonias Giuseppe di Bella (bailarín en Eurovision 2015)  y Sharone (Drag Race España) dieron el pistoletazo de salida a la fiesta. Chanel salió a dar la bienvenida al público, entre el que se encontraba su abuela, acompañada de María Eizaguirre, directora de Comunicación de RTVE, que ha mostrado todo su apoyo a este evento, sin dar noticia del mismo que se celebra en Madrid el 16 de abril. 

Citi Zeni y Subwoolfer: los más destacados

A partir de ese momento empezaron a aparecer los diferentes representantes de Eurovisión 2022 y algunas de las leyendas de pasadas ediciones. En el primer tramo de la noche, la actuación de Citi Zeni, representantes letonos, fue una de las más destacadas, a pesar de los problemas de sonido, que ellos mismos explicaron en redes sociales.

Los problemas de sonido fueron una tendencia durante la noche. A muchos de los artistas se los vio toquetearse los auriculares y algunos incluso optaron por quitárselos, aun así todos fueron capaces de terminar sus actuaciones de manera profesional. Llegó el turno de Subwoolfer, representante noruegos, amados y odiados a partes iguales, pero uno de los serios candidatos a la victoria el próximo 14 de mayo.

Otro de los platos fuertes de la noche debía ser Achille Lauro, el representante de San Marino y estrella de la música italiana, pero causó baja a última hora por un positivo COVID-19 en su grupo de músicos. Esto en mayo no será problema ya que no se permite la música en directo en Eurovisión. 

Quién sí estuvo presente fue Senhit, representante de San Marino en 2021, 2020 y 2010. Aterrizó en Barcelona sin saber muy bien donde estaba, prueba de ello confundió España con Israel, ya que dijo que había preparado un mashup de canciones españolas y resultaron ser "Golden Boy" (Israel, 2015) y "Toy" (Israel, 2018). Algo controvertido iniciar el evento con la solidarización con Ucrania y terminarla obviando el conflicto israelí-palestino.

Para cerrar el evento llegaron Conchita Wurst y finalmente Chanel. La primera deleitó al público con su ganadora "Rise Like a Phoenix" y acabó convirtiendo la fiesta en su propio concierto, ya que llegó a cantar hasta seis canciones de su repertorio. La espera a Chanel se hizo un poco larga para la mayoría de asistentes que conocían pocas canciones de Conchita Wurst. Pero llegó el momento final, apareció Chanel y enloqueció la sala con su "Slo Mo". El público acabó coreando "ganadora, ganadora", habrá que esperar al 14 de mayo para ver si acaba sucediendo.