El pasado sábado se celebró la gala más importante del cine español, Los Premios Goya, y en su 36º edición fueron muchas las sorpresas y los momentos emocionantes que se pudieron vivir. La ciudad de Valencia se volcó enormemente para que todo estuviera a punto, la gala fuera desarrollándose de la manera más dinámica posible y el resultado fue muy positivo, siendo esta muy emocionante, sobre todo teniendo en cuenta que el pasado año los ganadores no pudieron estar presentes para recoger sus premios, pues de alguna manera han compensado esta ausencia siendo partícipes en esta nueva edición.

Este año todos estaban expectantes por ver cómo se iba a desarrollar la gala, pues era poca la información que se tenía acerca de su funcionamiento, sin embargo, el resultado fue bastante positivo. Como siempre, RTVE, el medio oficial de los premios, se encargó de llevar a cabo la retransmisión bajo la cautivadora voz de Carlos del Amor, siendo este una figura ya imprescindible de este acontecimiento anual, pues con su narración la emoción se palpa y se vive de cerca, aportando siempre datos sobre las películas o los artistas ganadores. 

Fuente: GTRES. Fernando León de Aranoa

  

Valencia, a la altura

La noche de los Goya no dejó indiferente a nadie, y es que fueron muchas las cosas destacables en esta 36 edición. Todos ellos llamaban a la celebración la noche del reencuentro, ya que el año pasado los artistas no pudieron celebrar la noche del cine juntos, sólo había que ver sus rostros para ver los felices que se encontraban de estar de nuevo reunidos. Eran muchos los que manifestaban su alegría de la vuelta a la normalidad, y aunque las medidas y restricciones por la COVID 19 estuvieron muy presentes, no impidió que el amor y el respeto se respirara en el aire.

Por la alfombra roja desfilaron todos ellos durante tres horas y media, momentos en los que estuvieron dedicados a la prensa. Se pudieron rescatar algunas de las declaraciones en las que todos afirmaban lo contentos que estaban de poder celebrar esta 36 edición en Valencia, algunos porque nacieron en este lugar, como Inma Cuesta, que destacaba lo feliz que se encontraba en su tierra, o Arturo Valls, orgulloso de poder celebrar la noche del cine español “en casa”. En cualquier caso, Valencia supo estar a la altura, pues fue destacable la organización con la que se llevó todo a cabo y el resultado fue espectacular, habiendo adaptado el Palau de les Arts a las necesidades de los artistas y a los equipos de prensa perfectamente.

Penélope Cruz y Javier Bardem. Fuente: El español

 

Primeros premios de la noche

A las 22h dio comienzo la gala de la mano de Bebe, Jedet y Cristina Castaño. Estas últimas comentaron la ilusión por actuar en una noche como la del sábado, sin embargo, el resultado que se pudo ver posteriormente no fue tan positivo como se esperaba, de tal forma que la apertura de la gala, y de la primera actuación musical, fue un tanto decepcionante, con una interpretación que no fue nada destacable para una gala como la de los Premios Goya.

Tras ella, la sucesión de las entregas de premios dio comienzo. Algo innovador de esta última edición fue la ausencia de presentadores, que se suprimió, siendo los sustitutos de este papel diferentes artistas invitados que iban llegando al escenario de tres en tres para dar entrega de los cabezones. Esto, aunque podía parecer una novedad que favoreciera al desarrollo de la gala, finalmente lo que provocó, fue todo lo contrario, haciendo que la misma fuera aún más monótona que en otras ediciones. Quizás sería adecuado replantearse esta decisión para futuras ocasiones.

"Las Leyes de la frontera" se posicionaba entre las más premiadas nada más comenzar la noche, obteniendo numerosos reconocimientos, como, por ejemplo, el de mejor actor revelación para Chechu Salgado. Esta, sin duda, se trata de una de las categorías más emocionantes de la noche por la naturalidad y la alegría que suelen desprender sus ganadores una vez que son elegidos, y es por ello por lo que este año la Academia dedicó unos minutos para que antes de la entrega del premio, los nominados pudieran ver vídeos de sus seres queridos, momento que emocionó enormemente a los actores. En cuanto a la categoría de mejor actriz revelación, María Cerezuela fue la encargada de subirse al escenario a recoger su premio por "Maixabel", pues su papel como hija de Maixabel Lasa realmente la hacía merecedora del mismo.

Chechu Salgado. Fuente: La Región

 

Cate Blanchett, Goya Internacional

Tras ello, fue el momento de recibir a la primera actriz en recibir el Goya Internacional, haciendo así historia en estos premios. Hubo una mala introducción por parte de la Academia a la hora de entregárselo por no seleccionar fragmentos que mostraran por qué Cate Blanchett era merecedora de tal premio, lo cual hubiera sido mucho más lógico que poner simplemente fotografías de la artista, pero, en cualquier caso, se agradece que una actriz de la talla de  Blanchett estuviera presente. De la mano de dos artistas españoles internacionales, Penélope Cruz y Pedro Almodóvar, la artista recogía su premio. Ya en la rueda de prensa anunciaba lo contenta que estaba de recibir este reconocimiento, porque tal y como comentó, “recibir este premio significa que mi trabajo ha llegado a una cultura diferente”. Emocionada,  hablaba de la influencia que había sido para ella el cine español desde que vio una película de Buñuel en el instituto, “eso cambió mi forma de ver el mundo”. Afirmaba que el cine español había sido una gran influencia para ella, algo que repitió en la recogida del premio, en la que se mostró realmente contenta por recibirlo.

Su discurso fue breve, pero tuvo palabras de agradecimientos para todos, deshaciéndose, en primer lugar, en piropos para su compañera Penélope Cruz, a quien le dedicó unas bonitas palabras acerca de su trayectoria y de la alegría de su nominación a la próxima edición de los Premios Oscar, y para Pedro Almodóvar, director con el que se muestra muy entusiasta para trabajar juntos en la próxima película del cineasta, “Manual para las mujeres de la limpieza”. Tras un gran aplauso por parte del auditorio, se despedía así Cate Blanchett de la noche, dejando uno de los momentos más esperados atrás.

Cate Blanchett. Fuente: Carlos Álvarez, ELLE

 

A continuación, se dieron paso a más entregas de premio, como mejor largometraje documental a “Mama” o el mejor cortometraje de animación para “The monkey”. Destacable es el momento en el que Verónica Echegui recogía su premio a mejor cortometraje de ficción por “Totem Loba” en el que se dirigió directamente al presidente del Gobierno, Pedro Sánchez. “Me gustaría que lo vieras con tus hijas y luego lo comentáramos”, dijo, concluyendo con “De verdad, tomátelo en serio”. 

La noche continuó entregando el premio a mejor música original, que fue dado a "El buen patrón", la triunfadora de la noche, aunque sólo se llevó seis cabezones pese a ser la más nominada no sólo de la edición, si no de toda la historia de los Premios Goya. Seguido de ello, María José Llergo emocionaba a todos llevándose el premio a mejor canción original, contando así "Mediterráneo" con otro reconocimiento de la mano de Rozalén, la última en recoger este premio en la pasada edición. 

Entrega de premios más esperados

Grandes momentos fueron en los que Clara Roquet, Nora Navas y Urko Olazábal se convertían en ganadores de sus categorías. La categoría a mejor dirección novel se ha convertido en los últimos años en una de las nominaciones más especiales por lo emocionante que ha sido ver cómo año tras año cineastas mujeres recogían este reconocimiento por sus trabajos. Desde Carla Simón en 2017, que se lo entregó al año siguiente a Arantxa Echevarría por “Carmen y Lola”, quien a su vez se lo entregó a Belén Funes y esta a Pilar Palomero por “Las niñas”, el Goya a mejor dirección novel parece ser un talismán, tal y como contaba Clara Roquet, ganadora por su película “Libertad”: “Este premio es un talismán y ahora lo tengo yo, a ver a quién se lo doy el año que viene” comentaba entre risas. Contenta y emocionada, en su discurso habló de, precisamente la restricción de libertad en el cine, afirmando que “solo accedemos a hacer cine gente con ciertos privilegios y eso empobrece los puntos de vista”. 

Precisamente una actriz de “Libertad” se hizo con el Goya a mejor actriz de reparto, pues fue para una contentísima Nora Navas, quien afirmaba que no se esperaba este premio. La vicepresidenta de la Academia lo recogía llena de emoción y felicidad, agradeciendo su premio a sus compañeras de nominación y a su familia, concluyendo con una frase que pudimos oír mucho: “¡Viva el cine!”. Un premio más que merecido, pues, aunque todo apuntaba a que la ganadora de este año podía ser Aitana Sánchez Gijón, actriz que conseguía por primera vez una nominación al Goya en toda su maravillosa y larga trayectoria, la interpretación y el trabajo de Navas fue finalmente el reconocido por la Academia con el cabezón. El Goya a mejor actor de reparto era para Urko Olazábal, por "Maixabel", quien se lo dedicó a su madre y se lo agradeció a la directora Icíar Bollaín.

Nora Navas. Fuente: El español, GTRES

 

Los mejores actores protagonistas protagonizaron grandes momentos en la gala. Blanca Portillo recogía su premio a mejor actriz protagonista visiblemente feliz y agradecida, afirmó en varias ocasiones que no se lo esperaba y que era un regalo inmenso para ella. Se lo dedicó a sus padres, a sus compañeras de nominación, especialmente a Penélope Cruz, con quien se intercambió palabras de amor, y a Luis Tosar e Icíar Bollaín. Precisamente de amor incondicional, como ella lo llamó, habló en su discurso. Con esa serenidad que la caracteriza, Portillo emocionaba con unas palabras llenas de sentimientos. Después, en la rueda de prensa, cuando le preguntaron qué sentía al ser su primer Goya, decía: “Estoy muy contenta porque nunca he tenido prisa para casi nada. Me ha sorprendido y me ha hecho enormemente feliz”.  Por otro lado, era Javier Bardem por "El buen patrón" quien subía a recoger el premio a mejor actor protagonista. Se mostraba contento con este nuevo premio, y se lo dedicó a Fernando León de Aranoa, con quien tiene una amistad de hace más de veinte años, a su mujer Penélope Cruz y a su madre, Pilar Bardem. “Me enseñó a vivir y a sobrevivir y el amor y respeto por esta profesión, un referente para mí, una actriz inmensa y uno de los mejores seres humanos que me he encontrado en mi vida”, decía.

José Sacristán, Goya de Honor

No se puede dejar atrás al Goya de Honor. Nora Navas fue la encargada de introducir a José Sacristán con nombres de la filmografía del artista. Tras una ovación por parte de sus compañeros, José Sacristán comenzaba a dar uno de los mejores discursos que se ha escuchado en los últimos tiempos. Con su voz imponente, el artista afirmaba:  “Gracias a todos los que con su confianza en mi trabajo me permiten seguir arando, sembrando y cosechando frutos como este”. Un discurso conciso, corto y emocionante que hizo que todos los que estaban escuchando se quedaran embelesados con sus palabras.

José Sacristán. Fuente: EFE

 

"El buen patrón" concluyó la noche llevándose seis grandes premios, el de mejor película, dirección, montaje, música, guion original y actor protagonista, mientras que "Maixabel" se llevó tres, reconociendo a los actores de esta con el cabezón a mejor actriz protagonista, mejor actriz revelación y mejor actor de reparto. Cinco fueron los premios para "Las leyes de la frontera" de Daniel Monzón, mientras que "Mediterráneo" obtuvo tres, entre ellos, mejor dirección de fotografía. "Libertad" obtuvo dos, a mejor dirección novel y mejor actriz de reparto y la sorpresa fue que "Madres Paralelas", de Pedro Almodóvar, no se llevó ninguno, pues, aunque la calidad de los largometrajes era muy alta, no se esperaba esta ausencia de premiso.

En cualquier caso, se trató de una noche emocionante, sobre todo por el reencuentro entre los invitados, que no pudieron más que mostrar su alegría y entusiasmo por vivir una noche así de nuevo, por la entrega del primer Goya Internacional a Cate Blanchett, el Goya de Honor a José Sacristán y la emoción de los ganadores, que hacen que este tipo de galas sean especiales y emotivas.