El próximo 4 de diciembre llega a Netflix "Mank", última cinta dirigida por David Fincher y que cuenta con todas las papeletas para arrasar en los próximos Premios Oscar. Como viene siendo habitual en la mayoría de los títulos más esperados del gigante de streaming, "Mank" ha debutado dos semanas antes en los cines, una oportunidad única para poder disfrutar de una cinta que merece ser vista en pantalla grande.

Tras la aclamada serie "Mindhunter", Fincher vuelve al mundo del largometraje con "Mank", un terreno que no pisaba desde que estrenó en 2014 "Perdida". "Mank" es un biopic sobre Herman Mankiewicz, guionista de "Ciudadano Kane". El filme repasa el proceso de rodaje de la obra maestra de Orson Welles dirigida y estrenada en 1941.

David Fincher completa sobre un viejo guion de su difunto padre Jake Fincher una indiscutible carta de amor al cine y un exquisito homenaje al proceso de creación, denunciando también el mecanicismo en el que se incurre hoy día.

Escrita con mucha inteligencia y consciencia y rodada en un impresionante blanco y negro, "Mank" muestra la época dorada de Hollywood en una amplia gama de grises donde expone sus luces y sombras. Una maravillosa inmersión en la historia del cine donde se tocan temas como la corrupción y el poder político.

Gary Oldman está apoteósico interpretando a un cínico Herman Mankiewicz y podría conseguir el segundo Oscar en su carrera. Casi igual de brillante está Amanda Seyfriend como Marion Davies, ofreciendo de lejos la mejor actuación de su carrera. La excelencia de sus protagonistas junto con la potencia de su guion y espectacular filmografía convierten a "Mank" en uno de los títulos del año y en uno de los trabajos más redondos de David Fincher. Su visionado es obligado y necesario para cinéfilos.

Valoración: 4/5

Lo mejor: Su potente retrato del nexo entre el entretenimiento, la prensa y la política

Lo peor: Que su estética y la nostalgia que provoca sea en muchas ocasiones más poderosa que la historia que relata