En Cine Vavel hemos tenido la oportunidad de entrevistar a la actriz Alexandra Masangkay, una profesional polivalente que se mueve en diferentes ramas artísticas como el teatro, el cine o incluso la pintura dejando traslucir todo su potencial artístico. Pero eso no le impide dejar tiempo para reflexionar sobre sí misma y los que le rodean con gran sentido de responsabilidad, buscando la mejor forma de vivir la vida con simpatía y sinceridad.
P: Imagino que ahora debe ser todo muy confuso para el tema de rodajes, proyectos y demás. ¿Cómo está sobrellevando como artista esta intermitencia en el sector cultural y la incertidumbre sobre el futuro de la pandemia?
R: Creo que al final en todos los sectores y en todas las profesiones esto nos ha afectado profesionalmente. En el nuestro es cierto lo que tu dices de que es una situación extraña e inestable, ya de por sí nuestro sector es así, entonces sumarle esta situación pues no ha ayudado mucho. Ahora mismo estoy bastante más tranquila y contenta de ver que las cosas se están moviendo, que hace unos meses estaba bastante asustada en el sentido de qué va a pasar, si íbamos a poder rodar, si los teatros van a poder abrir…
Hace poquito fui por primera vez al cine después de mucho tiempo y la verdad que controlan muchísimo las medidas de seguridad, son muy conscientes de la situación y se están respetando de forma que la gente deje de tener miedo, de que realmente pueden ir al cine sin problemas. Los asientos están separados, se sale en orden de fila, hay en todos los lugares desinfectantes para limpiarte las manos, siempre hay una persona controlando que todos vayan cumpliendo con lo que se supone que es nuestra responsabilidad. Entonces creo que eso es lo importante en nuestro sector, tenemos que demostrar que somos un lugar seguro. No se sabe si de cara a septiembre u octubre va a volver a pasar, pero es cierto que por suerte están empezando los rodajes, hay castings, hay un movimiento interno. Lo importante es que todos seamos responsables y cumplamos con lo que nos toca.
P: ¿Ha sido difícil adaptarse a todas las nuevas medidas restrictivas que se exigen en los rodajes?
R: Justo estoy empezando a rodar un cortometraje, bueno vamos a empezar a rodar en un par de semanas y la verdad es que no se muy bien cómo va a ser. Supongo que va a ser un poco extraño, todos con mascarillas, es cierto que los actores no vamos a poder actuar con mascarilla pero creo que al final es lo mismo de antes de que, cuanto más conscientes seamos pues mejor para todos y para nuestras familias. Porque nosotros que somos jóvenes no lo notamos, no nos afecta directamente, no somos el foco que sufre verdaderamente la COVID, son nuestros familiares más mayores. Entonces yo creo que eso nos tiene que pesar de alguna forma para que en los rodajes o en cualquier puesto de trabajo seamos responsables.
P: Actualmente se encuentra trabajando en un nuevo proyecto, un cortometraje llamado "Madilim", ¿qué puede contarnos sobre eso?
R: Pues ha sido resultado del confinamiento, yo creo que mucha gente ha descansado o han hecho muchas cosas y en mi caso pues he exteriorizado artísticamente muchas facetas mías que tenía. He pintado, no soy pintora de verdad profesional pero me encanta porque me ayuda a desconectar y a disfrutar; y luego también hemos escrito un corto y un largo. El corto es justo este "Madilim", que es una especie de corto de terror, suspense y el contexto es un poco similar al nuestro, postapocalíptico, si la pandemia hubiera sido algo realmente destructivo entre nosotros, que la hubiéramos liado muchísimo y todo se hubiera ido al garete. Pues ese es más o menos el contexto, y los personajes protagonistas son, mi pareja, Javier Taboada, que también es actor y ha escrito conmigo el corto; y yo. Son dos supervivientes que de repente encuentran una casa que aparentemente parece vacía e intentan pues vivir allí. El tema es que lo que creían que iba a ser un hogar se complica un poquito.
P: Hasta ahora su papel se había limitado a delante de cámaras, sin embargo, ahora toma las riendas del proyecto desde su nacimiento como co-guionista de la obra. ¿Cómo se ha sentido formar parte del equipo de creación del proyecto? ¿Había hecho algo así con anterioridad?
La verdad es que no, es la primera vez que me encuentro una situación así y ya de antes sabía lo complicado que era y le tenía muchísimo respeto al trabajo de mis compañeros. Pero es que ahora siento que es realmente complicado tener que gestionar parte de la preproducción, de la parte creativa y luego obviamente mi trabajo como actriz. Espero que no me estalle la cabeza, la verdad. Pero también tiene esa parte gratificante de que es tu bebé, es tu proyecto y sientes que hay esa energía de más para poder meterle ganas y sacarlo adelante.
P: ¿Quién es Sagisi, qué puede contarnos sobre ella? ¿Se siente identificada con el personaje?
La verdad, de lo que tenemos en común yo creo que son los rasgos, pero aparte es una mujer superviviente, tiene ese instinto que a veces cuando te encuentras en situaciones límite te sale una energía de más para superar los problemas. También tiene algo muy potente y es que tiene como una especie de sexto sentido, una sensibilidad muy desarrollada. Ella puede sentir, ver o imaginar, cosas que nuestros ojos no ven. Eso me gusta muchísimo, me gusta que el personaje sea sensitivo. A mi me gusta tener mucha escucha, tanto con mi cuerpo como con la gente que me rodea y con el ambiente, pero no llego al nivel de ella la verdad.
P: En principio la obra aspira a romper con los estereotipos tanto raciales como de género que están presentes en la sociedad. ¿Qué tan importante cree que es que las obras deben ser un reflejo de la diversidad de nuestra sociedad?
Creo que es básico, como algo que no debería ni cuestionarse porque sales a la calle y hay personas de diferentes lugares y no vamos preguntando constantemente de dónde son, ya damos por hecho que son personas y luego pues si sale una conversación donde surja el tema de los orígenes ya sabremos si son de aquí o de allí.
Creo que lo ideal sería que nuestras historias no tuvieran la necesidad de justificar constantemente por qué la actriz o el actor tiene unos rasgos concretos. Yo soy del centro Barcelona y siempre he estado rodeada de gente de diferentes nacionalidades como yo, con personas que tienen padres inmigrantes pero que nacieron en España. Pero luego cuando he entrado dentro de esta industria pues de alguna forma me he dado cuenta de que obviamente por mis rasgos tengo un perfil. La mayoría de castings que aparecen tienes que hacer un determinado acento y demás… que me parece perfecto y de hecho me encanta porque así también descubro mis orígenes. Por ejemplo, al haber hecho la película de "Los Últimos de Filipinas" me interesé más sobre mis orígenes por la cultura filipina y aprendí muchísimo. Pero también siento que ya estamos en un momento en el que podemos normalizar esto, que también hay muchos guionistas con historias maravillosas que cuentan este tipo de cosas y espero que yo no únicamente pueda acceder a un personaje racial sino a cualquier mujer que tenga un rango de edad similar a la mía, por ejemplo.
P: Otro de sus papeles más recientes ha sido su participación en la película "El Hoyo", que ha dado la vuelta al mundo y se ha convertido en una de las películas más vistas en Netflix. ¿Cuál es su opinión personal sobre la obra, dónde cree que radica su éxito?
La verdad yo creo que han habido muchos factores con "El Hoyo", pero es cierto que yo cuando me leí el guion por primera vez ya flipé, no sabía ni lo que iba a ser ni a qué me estaba enfrentando. Es algo muy original, las películas de género no son comunes dentro de España, hay algunas, pero es cierto que no se les está dando tanto bombo y "El Hoyo" ha tenido ese empujón dado que justo ha coincidido con las primeras semanas de confinamiento aquí en España y creo que de alguna forma nos ha obligado a verla. Lo que pasa es que a veces la gente, o no tiene tiempo o no puede y no ve pues según qué películas. Pero luego hay películas que te sorprenden como es "El Hoyo", y no tiene nada que envidiar con otras producciones extranjeras, así que tanto por guion, como por efectos especiales, como por el trabajo de mis compañeros actores y actrices… creo que es un pack bastante compacto como para merecerse todo lo que se ha llevado hasta ahora.
P: ¿Fue difícil prepararse para su papel dentro de la película como "Miharu"?
Sí, la verdad es que el primer conflicto que tuve fue que no tuviera texto. Al final los actores, de alguna forma u otra, cuando estas ensayando y demás como que te acabas escondiendo detrás de un texto, o cuando empiezas a trabajar siempre te coges el guion y trabajas el texto. En este caso también cogí el guion, obviamente, para coger toda la información que tenía sobre lo que decían de Miharu y las relaciones que tenía ella con otros personajes pero me di cuenta de que necesitaba tirar para otro lado, un trabajo más del cuerpo, más de la escucha y del instinto. Durante tres semanas me estuve entrenando, en un sótano me encerraba dos o tres horas al día e investigué un poquito, dentro de toda la información que sabía de Miharu y busqué cosillas, detalles y rasgos sobre ella. Al final creo que salió de una forma muy espontánea y muy natural.
P: Bailarina, cantante y actriz, ha participado en diversos proyectos; musicales, largometrajes, cortometrajes... con diferentes papeles ¿Pero hacia dónde le gustaría que se encaminara su carrera en el futuro?
R: Pues la verdad, después de todo lo que está sucediendo, me cuesta muchísimo mirar de aquí a dos años. Creo que después de lo sucedido lo importante es que nos planteemos muy bien qué está pasando ahora, que podemos hacer ahora y obviamente ir a una dirección y tirar hacia delante. Pero no me cierro puertas a nada, me gusta muchísimo todo, es cierto que después de lo del corto me apetece también producir y contar historias. Yo creo que ahora mismo estoy en este punto de no querer depender de lo que sucede sino también buscarme las mañas para poder hacer personajes que me gustan, contar historias que quiero… que no sea todo moral, también pueden ser historias que simplemente sean para entretener. Al final un poco lo que surja, es como cuando coges un lienzo y empiezas a pintar, lo que necesite el cuerpo y el momento.
P: Hemos hablado de su presente y su futuro, pero déjeme preguntarle por tus inicios. Hasta donde sé la rama artística entró por sorpresa en tu vida y lo cambió todo. ¿Cómo es de repente dejarlo todo atrás por tus sueños?
Pues yo tengo orígenes filipinos y mis padres vienen de allí, lo cual hacía mucha responsabilidad en hacer lo que ellos quisieran de mi, no quería decepcionarlos. Obviamente yo entré en la universidad, empecé ingeniería química pero antes entré en "Operación Triunfo" y nunca antes había estado en contacto con mi faceta artística, hasta después de ese programa que entonces que di cuenta que me gustaba mucho. Lo que pasa que tampoco me sentía muy valiente en ese entonces, seguí con la carrera y después me surgió otra serie musical en Madrid y salió esa oportunidad. Yo creo que de alguna forma mi instinto me tiraba hacia allá pero yo todavía no estaba mentalmente preparada. Fue un poco inconsciente, le dije a mis padres que me iba a ir tres meses a rodar y cuando me fui no volví a Barcelona, me quedé en Madrid. LLevo ya ocho o nueve años en Madrid y todavía forjando una carrera. No fue realmente premeditado aunque yo creo que siempre hay algo dentro que si tiene que salir sale.
P: Por último, ¿qué consejos le daría a aquellas personas que se debaten entre hacer lo que deben hacer y lo que realmente quieren hacer?
Yo recomendaría algo que me parece muy difícil, pero que se aprende con el tiempo y que es escucharnos y no buscar complacer a los demás porque al final uno tiene su propia vida y aunque estes acompañado de gente los que te quieren van a estar y van a confiar en tus decisiones y eso es lo importante. Hay que disfrutar del camino porque si ya vamos sufriendo hasta el final no vamos a llegar a ningún lado.