La primera vez que San Fernando escuchó a Dani Fernández, su voz aún no había roto, no había salido del cascarón. Aún era dulce, tranquila, a medio camino entre la juventud y la adultez. Fernández coqueteaba con la música desde que era un niño, y cuando llegó en 2013, ya tenían él y ella una relación casi estable. Sin embargo, por aquella época, no era algo exclusivo. Dani Fernández formaba parte de la por aquel entonces boyband emergente Auryn.
Los años pasaron y los éxitos bajo la marca Auryn llegaron a su vida sin parar. Cinco años de giras alrededor del país, premios nacionales e internacionales, discos de oro, platino, colaboraciones con artistas de renombres… Cinco años de historias entre cinco chavales que un día decidieron tomarse un descanso para ver qué les deparaba la vida en solitario. Y en aquel momento, Fernández y la música decidieron formalizar su relación y prometerse unión eterna.
De esa bonita relación, en mayo de 2018, nació el primer tema: “Te esperaré toda la vida”, que cantaba en la noche del 13 de agosto de este año a San Fernando mientras les confesaba que eran “la puta hostia” como público. Con este tema, poco a poco la relación se ponía viento en popa a toda vela en dirección al éxito en solitario. Bueno, al éxito entre Fernández y la música, que son uno pero van cogidos de la mano a todos lados.
Un año después, el primer gran hijo, Dani Fernández decidió llamarlo “Incendios”, y en él se encuentran toda la verdad de sus sentimientos e historias, algo que en directo, representa a la perfección.
Con “Incendios”, el madrileño tuvo la oportunidad de volver a San Fernando, no una, sino en dos ocasiones. Pero el concierto seguía sin ser suyo propio. La música le daba unos minutos de protagonismo para él ante el público gaditano, pero su nombre llegaba a la Isla en un cartel de Los 40 Summer Live acompañado de otros artistas.
La llegada del confinamiento hizo que el “Tour Incendios”, que ya iba por su segunda vuelta, su “Second Round”, quedara paralizado. La pandemia podría haber dañado aún más el camino del artista, pero lo que Fernández y la música sienten por ellos, no los para nadie. Y es por ello por lo que, en cuanto la luz empezó a aparecer al final del confinamiento, Dani Fernández se puso manos a la obra para llevar por España su “Incendios Acústicos 2020”.
Así, el pasado 13 de agosto llegó al “Bahía, ¡en vivo” de San Fernando, y por fin, después de tantos años y tantos intentos, el concierto era suyo propio. Música y Fernández solos ante el público gaditano. Y fue todo un acierto.
Las localidades no habían sido vendidas al cien por cien, pero la gente que estaba allí, estaba en cuerpo y alma con la música de Dani Fernández, que entró al recinto prendiendo fuego (no literalmente) con su tema “En llamas”. El calor llegó a la ciudad gaditana, que desde hacía días había sido asediada por el famoso viento de Poniente y convertía las noches más frescas de lo normal. Llegó con la voz rota del artista, que le cantaba al “Miedo” y dejaba las cenizas de sus llamas sobre el escenario.
La noche fue pasando, y Música y Fernández cantaban desde los temas que habían creado en conjunto, a versiones de otros compañeros, como “Sargento de hierro” de Morgan o “Contra las cuerdas” de Sidecars. La música sonaba, Fernández cerraba los ojos para sentirla, y de su voz salían historias con más emociones de las que las palabras pudieran contar.
Entre las actuaciones destacaba, no sólo el sonido acústico eléctrico de temas como “Ahora” o “Y te diré”, tema que el cantante dedicó a todas las víctimas del Covid de los últimos meses. Eso sí, la versión de “En la casa de Inés” del grupo Guarana, dónde tan sólo estuvieron presentes la guitarra y Fernández cantando sin micrófono, terminó por ponerle la guinda al pastel en una noche hecha a medida para él y su música.
El concierto terminó con “Disparos” y “Bailemos”, que recientemente ha resultado disco de oro, y que hizo levantar al público. “Ahora esta parte, levantaros, pero sin moveros del sitio. Con mascarilla. Respetando las distancias”, decía Fernández a la audiencia, dando vía libre para la diversión pero concienciado y concienciando de que, sin la colaboración entre todos, no se puede luchar contra la pandemia. Todo porque la música siga viva en estos tiempos.
Dani Fernández cerró una fresca noche de verano de San Fernando, subiendo un poco la temperatura con sus “Incendios Acústicos”, y demostrándole por fin a la ciudad de lo que es capaz en solitario. Dani Fernández está casado con la música, y ambos cantan juntos para demostrar que, con conciencia, se puede seguir disfrutando de ella en tiempos de pandemia.
