Desde que la pandemia del coronavirus llegará a Reino Unido, se establecieron cinco niveles de alerta. El nivel 5 implica que el virus circula ampliamente y los servicios sanitarios están desbordados, es por ello que el confinamiento se convierte en algo necesario. El nivel 4 significa que el contagio es alto, se propaga y obliga a mantener el confinamiento y la distancia física. El nivel 3, en el que se encuentra actualmente el país tras el cambio, el virus está en circulación, pero en menor medida, por lo que se puede proceder a la desescalada. Para llegar al nivel 2, el país tiene que haber llegado a un contagio muy bajo y se podría reducir la distancia social. El nivel 1 significaría que el virus ya no circula por el país.

La cifra oficial de fallecimientos por coronavirus en este país ascienden ya a 42.288 personas tras los últimos recuentos. A pesar de las cifras, el ministro de Sanidad británico (Matt Hancock) se mostraba optimista: "El plan del Gobierno está funcionando. Los niveles de infección están descendiendo rápidamente."

En Reino Unido esta semana comenzaba la desescalada con la reapertura de los comercios que venden productos no esenciales, cumpliendo con todas las medidas de seguridad, entre ellas, la distancia física de dos metros entre personas en los establecimientos.

A pesar de haber disminuido el nivel de alerta por la COVID-19 en Reino Unido, las autoridades sanitarias británicas advierten de que el virus aún no ha terminado y apelan a la responsabilidad de todos los ciudadanos, que desde esta semana, ya disfrutan de nuevas medidas en el proceso de desescalada hacia la "normalidad" después de la pandemia.