Como hemos visto en las pasadas temporadas las “chicas del cable” se han tenido que enfrentar a diferentes situaciones algo complicadas. En la cuarta temporada la trama concluye en el asesinato de Ángeles donde sus amigos aprovecharon para escapar. También vimos como Óscar y Carlota comenzaban una vida nueva trasladándose hacia la ciudad de Paris. Todos esperaban que el hilo de la nueva temporada continuara de esa forma pero no ha sido el caso. Por los títulos de los capítulos esta temporada hemos tenido “locura”, “odio”, “valor”, “control” y “guerra”. La locura es el concepto más apropiado para definir esta temporada ya que en estos primeros episodios hemos visto a los personajes algo fuera de sí por las distintas situaciones en las que se encontraban.
La nueva parte de la temporada final se inicia con Lidia y su hija en Nueva York junto a Francisco, habían pasado siete años desde que abandonaron España pero Lidia vuelve al país para encontrar a la hija de Ángeles, Sofía la cual había huido de casa para luchar en dicha guerra a favor del bando republicano. Una vez llegada a Madrid, Lidia mantiene una gran cantidad de emotivos encuentros junto a sus amigas donde se puso al tanto de todas las novedades entre ellas el “supuesto” fallecimiento de Doña Carmen. Entre todas emprenderán una nueva aventura donde trataran de encontrar a Sofía.
Todos los fans esperábamos con ansias el encuentro entre Lidia y Carlos, fue algo violento ya que el odio entre ambos es bastante evidente. Carlos hace lo posible por hablar con su hija y deja a un lado el espíritu de venganza hacia Lidia lo cual es bastante positivo a pesar de la trágica muerte que sufre. Además tuvimos el reencuentro entre el trío cuando se unió Francisco para intentar sacarlos de la prisión.
En esta parte, hemos observado a un Pablo marchándose a luchar a la guerra, dejando a lo que más quiere, su mujer. Aunque la trama de Pablo nos tuviese con el corazón en un puño vimos el famoso encuentro con su gemelo Julio. En el caso de Óscar, debido a la represión que se produce tras la llegada de los sublevados a Madrid, su vida se ve amenazada y se ve obligada a volver a sus principios.
No todo es positivo en esta temporada, realmente no ha existido un gran espacio temporal de siete años entre muchos de los personajes protagonistas. A Sofía en la temporada pasada la vimos como una niña y en estos siete años se ha convertido en toda una mujer adulta lo que parece algo contradictorio. Además, la muerte de doña Carmen mencionada al principio del primer capítulo resulta ser falsa. A veces el papel de narradora de Lidia causa la impresión de que nos hayamos inversos en un spin-off. También llega a ser algo inusual la facilidad que tienen los personajes para viajar en avión de un lado para otro como es el caso de Lidia y Francisco.
Siendo la primera producción española de Netflix, ha causado mucho revuelo que llegue a su fin, aun no sabemos el estreno de la segunda parte aunque seguramente no volvamos a ver al grupo de chicas hasta el próximo verano. Esperamos que finalmente se resuelvan todas las incógnitas ya que el final de esta parte ha dejado muchas puertas abiertas para el destino de la segunda tanda de episodios.
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