La cinta es una secuela directa de la película de 2014 donde vimos por primera vez a la criatura de este universo. Godzilla es un lagarto gigante de más de 100 metros de altura (355 pies) uno de varios Titanes del mundo antiguo.


La cinta es un éxito en cuanto a la fantasía de lo que se nos muestra, dando a los fans lo que desean ver, criaturas míticas gigantes peleando entre sí y poniendo a la humanidad en medio de la batalla. Los efectos especiales y el desarrollo de la tecnología de animación es espectacular, realmente sirve como precedente para mostrar una excelente inmersión dentro de la ilusión donde viven estas criaturas; no obstante hay muchos fallos en el desarrollo del guión, la trama y los diálogos están desarrollados para que los protagonistas sean las criaturas y no exista mucho contexto fuera de ellas, es tanto el caso que en múltiples ocasiones los actores realizan acciones que no tienen sentido o repercusión alguna en escenas subsecuentes, de la misma manera los diálogos son exagerados y no sirven más que para dar que hacer a los humanos en el trasfondo de la historia mientras se desarrolla la aventura de Godzilla.


El director Michael Dougherty conoce de criaturas, tan es así que esta cinta es excelente en la construcción de ellas, dándoles la atención debida tanto en desarrollo argumental como en la construcción del personaje digital, no obstante su enfoque esta tan centrado en ellas que descuida todo lo demás. 


La cinta está plagada de talento, Kyle Chandler, Vera Farmiga, Millie Bobby Brown, Ken Watanabe, Bradley Whitford, Sally Hawkins y Charles Dance por mencionar algunos, todos grandes actores experimentados en la ciencia ficción y lo hacen espectacular, su desempeño no puede ser cuestionable pues se siente el compromiso y la intensidad en cada escena en la que todos estos actores están presentes, el problema general es para con el guión, la trama no logra equilibrar de manera adecuada la interacción entre monstruo y humanidad. 


No es algo malo tener mucha acción de Monstruos desmedida, lo que si es terrible es que solo sea eso, sin una motivación coherente con el contexto de las situaciones o que las acciones de los aquí presentes no tenga sentido más que para hacer relleno en la producción, hacen que la cinta se siente incompleta.


A final de cuentas es una película entretenida que te da exactamente lo que promete, batallas épicas entre los monstruos míticos más conocidos, enfrentamientos monumentales bien elaborados que asombran al espectador y favorecen a los fans, vayan a ver esta espectacular cinta de monstruos, el inicio perfecto del verano cinematográfico.