Ant-Man y la Avispa es una entrega que cuenta con la poca fortuna de ser estrenada a unos meses de Infinity War, no solo por el inconveniente de la alargada sombra del filme, sino por la difícil tarea de satisfacer a un público que viene de presenciar uno de los mayores acontecimientos en el género de superhéroes.

Los acontecimientos de la película toman lugar años después de los sucesos de la guerra civil, en ella se puede ver a un Scott Lang que tiene que afrontar las consecuencias de sus actos en dicho conflicto, el cual ha generado un distanciamiento tanto con Hope van Dyne como con el doctor Hank Pym.

Tras lo sucedido Scott volverá a ser solicitado por el doctor Pym y su hija para cumplir una misión de vital importancia que le llevará a superar retos que vienen en forma de situaciones difusas, antagonistas ridículos y una villana poco agraciada en cuanto a su desarrollo.

Con lo anteriormente dicho, habría que plantear la siguiente pregunta: ¿es Ant-Man y la Avispa una secuela que cumple con las expectativas?Lo cierto es que sí, aunque no de una manera resaltante, la película sabe aprovechar a la perfección facetas como la química entre los protagonistas o la adrenalina de las escenas de acción, que unidas a las habilidades del héroe de encoger y aumentar el tamaño de objetos dan lugar a un espectáculo visual único en el universo cinematográfico de Marvel.

Sin embargo mas allá de eso no tiene mucho que ofrecer, las situaciones cómicas que funcionaron en la anterior película no logran el mismo efecto en esta, ya que en ocasiones no llegan a ser lo suficientemente graciosas, mientras que en otras arruinan momentos que supuestamente deberían ser tensos o dramáticos. Por otro lado la villana principal tiene poca relevancia en el transcurso de la historia, y cuando hace presencia se ve opacada por otra trama que genera mayor interés, haciendo su participación poco destacable.

En resumen, Ant-Man y la Avispa es una secuela entretenida que aprovecha una parte de las virtudes que generaron éxito en el pasado pero que sobreexplota erróneamente otras, dando lugar a una película disfrutable pero no memorable.

 

Valoración: 3/5

Lo peor: el desgaste de las situaciones cómicas

Lo mejor: la habilidad e innovación a la hora de mostrar las habilidades del personaje en pantalla