Steven Spielberg es un gran director. Decir lo contrario sería pecar de arrogancia y de poca honestidad. Sin embargo, sí que es cierto que tiene películas y películas. Después del tropiezo de “Mi amigo el gigante”, Spielberg vuelve a regalarnos lo mejor de él, al igual que hizo a finales de 2015 con “El puente de los espías”.
“Los archivos del pentágono” es un film basado en hechos reales que cuenta la historia de que, en 1971, los principales periódicos de Estados Unidos tomaron una valiente posición en favor de la libertad de expresión, informando sobre el encubrimiento masivo de secretos por parte del gobierno.
El film funciona extraordinariamente. En primer lugar, siempre es un lujo disfrutar de la versatilidad de una Meryl Streep que nunca defrauda y demuestra una absoluta brillantez. En segundo, porque en la actualidad continúa habiendo polémica en torno a la libertad de expresión y el control por parte de los partidos políticos. Es interesante, a la vez que da un poco de miedo, ver que se ha avanzado tan poco en estos años.
La cinta es un docudrama muy emocionante y con secuencias de gran tensión, llena de una asombrosa energía cinematográfica. Como ya se observó hace un par de años con “Spotlight”, parece que el cine y el periodismo son dos elementos que funcionan a la más absoluta perfección.
Spielberg relata los acontecimientos con gran inteligencia sin caer en lo tópico y aburrido. Al contrario que en “El puente de los Espías”, que sobrepasaba las dos horas y media de metraje, aquí se agradecen sus 116 minutos, una duración perfecta para una película que pretende contar mucho de manera concisa y no dejar que el espectador desconecte ni un solo segundo.
Valoración: 4/5
Lo mejor: la tensión de su relato y una Meryl Streep que nunca decepciona.
Lo peor: aunque tengan muy poco en común, la sombra de "Spotlight" puede hacer que no triunfe en los premios tanto como debería.