El público siempre se fija en los actores, pero los actores, ¿en quién se fijan? La respuesta más rápida sería que en otros actores. ¿Y a quienes eligen? A los más talentosos, a los más premiados, a los que han destacado dentro de su círculo más próximo… Unos buenos espejos en los que mirarse serían actores como Santiago Segura, Leonardo Sbaraglia, Quim Gutiérrez… Todos ellos han demostrado su amplio registro en numerosas películas. Sin embargo, ellos 3 tienen también otro punto en común: ambos ganaron en su día el Goya a Mejor Actor Revelación.
El próximo sábado 4 de febrero, uno de los cuatro nombres siguientes se añadirá a esa lista de jóvenes promesas de nuestro cine a los que se le abren infinidad de puertas. Aunque ni ganarlo es seguro de éxito ni no ganarlo de olvido, lo cierto es que los productores y directores siempre están con el ojo puesto en busca en jóvenes (o no tan jóvenes) promesas. Estas son las cuatro de este año. Y para conocerlas mejor, es hora de preguntarse de dónde vienen, hacia dónde van y cuántas posibilidades tienen de que su nombre suene en la noche de los Goya.
Ricardo Gómez. 1898. Los últimos de Filipinas
Pasado. Tras colarse en el corazón y conseguir el afecto de todos los seguidores de la serie Cuéntame cómo pasó, Gómez no es para nada un desconocido en el mundillo, al menos de la televisión, gracias a su papel protagonista en la serie encarnando a un estupendo Carlos o su reciente aparición en la serie El Padre de Caín.
Personaje. Junto a otro gran actor televisivo como es Patrick Criado, interpreta a uno de los jóvenes reclutas. Le han intentado dar ese toque más adulto (bigote incluido), aunque su personaje no deja de ser el contrapunto de los grandes y veteranos protagonistas.
Futuro. Lo que él quiera. A falta de cumplir 23 años el próximo 25 de febrero, una carta de presentación tan buena como la que ha mostrado en 1898. Los últimos de Filipinas le acredita para cualquier género, habiendo probado ya su valía en drama y acción.
Posibilidades. Quizás la juventud pueda jugarle en su contra frente a actores más veteranos con papeles más protagónicos con los que comparte categoría (recordemos el caso de Tom Holland frente a Joaquín Núñez). Sin embargo, al fin y al cabo, aquí se premia al actor revelación, y no estaría nada mal hacer entrar a Carlitos en el cine por la puerta grande.
Rodrigo de la Serna. Cien años de perdón
Pasado. Actor y músico argentino, más que consagrado en su país, nominado al BAFTA por su papel en Diarios de motocicleta. A sus 40 años ha hecho prácticamente de todo.
Personaje. Pilar fundamental de la película (casi por encima de Luis Tosar) con un personaje nervioso y decidido a todo para conseguir su botín. Carismático donde los haya.
Futuro. No se puede decir que tiene toda la vida actoral por delante ya que ya no es un mozo, pero no estaría nada mal poder ver a este actor en más producciones españolas.
Posibilidades. Su papel es de los que más posibilidades ofrece de lucirse, aunque al mismo tiempo era el que más riesgo entrañaba debido a la personalidad del personaje y el tener al lado a Luis Tosar en casi todas las escenas. Sin duda, de las mejores actuaciones vistas este año, aunque ya se sabe que las películas de acción y más comerciales suelen sucumbir ante los dramas y thrillers más minoritarios.
Carlos Santos. El hombre de las mil caras
Pasado. El tiempo ha traído buenas cosas para aquel Pobedilla de Los hombres de Paco, lejos de estancarse, Carlos Santos ha ido escalando y haciendo méritos hasta situarse en el primer plano del mundo cinematográfico español. Sí, ha hecho varias películas antes que esta, como Miel de Naranjas, además de bastantes productos televisivos. Eso sí, nada de este calado e importancia para él personalmente, y mientras la productora no lo presente como candidato a los Premios Goya, como se suele decir, no corre convocatoria. Hasta ahora.
Personaje. Luis Roldán. ¿Hace falta decir más? Para quien sí, la película aporta suficiente información para llegar a conocer muy personalmente, en su día a día, con sus miedos, debilidades y aficiones a este ex Director General de la Guardia Civil que trató por todos los medios de salvar sus 1.500 millones de pesetas, escondiéndose, viajando, dándose por muerto, y quedando en manos de Francisco Paesa.
Futuro. Realmente este ha sido un año bien cargado para Carlos Santos. Además de un buen thriller alabado por la crítica, el público ha favorecido a su comedia Villaviciosa de al lado, y en TV ha aparecido en la deslumbrante Lo que escondían sus ojos. Con este currículum, a pesar de no tener destacados proyectos a la vista, será una gran revelación para los próximos años.
Posibilidades. Este es ese drama y thriller ante que suele triunfar en los Goya. Junto a Rodrigo de la Serna, es el que más papeletas tiene y su cara es bien conocida para el público en general. A algunos quizás les extrañe su presencia en la categoría de revelación, pero ya sea por esta o por secundario iba a estar nominado, y ser el personaje sobre el que gira la película no hace más que auparle a una más que posible victoria.
Raúl Jiménez. Tarde para la ira
Pasado. Apariciones en series como Águila Roja o Toledo y en la película estrenada en 2005 Reina, además de alguna que otra también menor, lo suficiente como para no presentarle como candidato a los Goya.
Personaje. Podría ser el típico de fondo que pasa de largo, pero en sus pocas escenas en ese típico bar de clase baja Raul Jiménez se desenvuelve como pez en el agua, con toda la naturalidad posible. Atento a su alrededor, a las personas, sin saber la ira que se está gestando en lo oculto y el amor que va a surgir en lo privado.
Futuro. Al igual que el anterior, no tiene proyectos destacables a la vista. Desde luego, un premio Goya sería un increíble impulso para tenerlos, ya que también podría correr el peligro de ser el típico nominado de relleno que es olvidado una vez pasa la gala. Habrá que ver si, en cualquier caso, es capaz de reinventarse para el futuro y seguir explotando su talento.
Posibilidades. Su participación en la favorita de la gala puede auparle en esta categoría, además del hecho de brillar en la película desde el fondo. Raúl Arévalo ya ha metido a los dos protagonistas de su cinta en la categoría de mejor actor principal, y este actor sí que sería una completa revelación, aunque si ya no estaba claro su nominación, menos lo está su posible victoria.
