Los hermanos más famosos de Minnesota han vuelto a las andadas con un nueva película que parece aunar sus señas de identidad: diálogos inherentes, surrealismo cañí y actores de prestigio. Los baluartes del cine independiente americano se jactan de su superioridad para con los grandes estudios retratándolos en una película sobre el 'star system'. La nueva propuesta de los hermanos Coen nos trae una farragosa historia llena de incoherencias argumentales que resultan encantadoras. La película narra las peripecias de un agudo productor (Josh Brolin) del Hollywood dorado que tiene que sortear mil obstáculos para hacer que la máquina de los sueños continúe funcionando.
Con un reparto de ensueño, los Coen hacen un artificioso esfuerzo para no caer en el efectismo. Lejos de su estilo habitual, esta es una cinta con una historia densa llena de múltiples peripecias en un guion muy Coen. Diálogos imposibles, surrealismo rimbombante y formas atípicas homenajean a un cine que se fue y no volverá. El tributo a los estudios es palpable en cada plano consiguiendo risas en algunos momentos de la película, aunque no es esta la dinámica general.
El 'star system' es fotografiado con precisión hasta llevarlo a la sátira mas mordaz que nos muestra a las estrellas deprimentes con las que ningún productor querría contar. Los seguidores más fieles de los hermanísimos pueden sentirse desatendidos por la que puede ser su película más cinematográfica.
La época en la que a los trabajadores del cine se los perseguía por su ideología es retratada como una concatenación de hechos descontrolados con un solo patrón común: Josh Brolin. El actor hace encajar una película llena de gags con apariciones de grandes actores. La falta de protagonismo de buena parte de ellos puede ser uno de los puntos flacos de la cinta. Con una puesta en escena cuidadísima, los directores ponen de relieve su evidente talento fílmico en un terreno ajeno. Bailes, Marcuse, excentricidades, balbuceos y unas gemelas protagonizan una comedia olvidable pero con momentos brillantes.