A veces dice más de una edición la película que se elija para abrir la sección oficial que los títulos que la conformen a posteriori. Si a esta premisa nos atenemos, la 68º edición del Festival de Cannes es una oda de amor a Francia, a su cine, a sus realizadores y, muy particularmente, al papel que desempeñan las mujeres dentro de la industria.
Y es que por segunda vez en su historia una realizadora, francesa, ha sido la encargada de levantar el telón de fondo de la Croisette. Hablamos de Emmanuelle Bercot y su largometraje La cabeza alta, todo un juego de palabras, ¿no creen? La película, que no opta a la Palma de Oro, se presentó el pasado miércoles en la Costa Azul con grandes esperanzas y tibias reacciones por parte de la prensa especializada.
Este drama social está protagonizado por Catherine Deneuve
Este drama social retrata la marginalidad en la adolescencia y las acciones de todas aquellas personas que cruzan sus caminos con estos jóvenes para intentar evitar que caigan en la criminalidad y la exclusión social. "La película habla de la educación, que es fundamental, y de que en los casos de familias que no la pueden dar, es la sociedad quien debe hacerlo. Un niño no es un salvaje, si se convierte en eso es porque no ha tenido la suerte de recibir (una educación)", explicó Bercot en el marco del certamen.
La célebre estrella gala Catherine Deneuve encarna a una jueza de menores que ayuda al joven protagonista a no perder su rumbo en la vida. "Hay mucha gente que se ocupa de ellos y les dedica su tiempo. Pero no se puede salvar a todo el mundo", concluyó la intérprete que no dudó en acudir a audiencias de juzgados de menores en París para preparar a conciencia su papel.