Es posible que Joseph Gordon-Levitt, nacido en Los Angeles en 1981, sea una de las figuras más valiosas del panorama cinematográfico actual. Un caso curioso el suyo ya que, a pesar de que conforma un eslabón más en el impecable sistema de creación de celebrities que es Hollywood, el californiano ha conseguido mantenerse al margen de semejante conglomerado.

Últimamente, Gordon-Levitt se ha dedicado a explotar su faceta cómica

Capaz de dar la talla en superproducciones, así como de mostrar su lado más personal en proyectos de corte independiente, su rostro es reconocido por el público al instante. Su pestigio no se sostiene a base de exquisiteces, sino que nace de su forma de ser: entrañable, trabajador y dispuesto a correr riesgos, tal y como hizo al embarcarse en la dirección de su primer largometraje, Don Jon, una comedia romántica innovadora que también se encargó de escribir. Esta obra supuso un hito en su trayectoria, pero no el único. A continuación, cinco puntos álgidos que bien podrían considerarse las claves de su fructífera carrera, actualmente dedicada a la explotación de su faceta cómica en programas como Late Show with David Letterman y HitRECord on TV.

10 razones para odiarte (1999)

Antes de compartir pantalla con Julia Stiles y Heath Ledger en una de las cintas de género adolescente más icónicas de la historia, Gordon-Levitt había sido visto en numerosos episodios de diversas series de televisión y telefilms. Aún no había alcanzado los diez años de edad cuando comenzó a actuar; poco después de cumplirlos ya participó en varios largometrajes, como Beethoven - Uno más en la familia. No obstante, toda una generación se familiarizó con su presencia en 10 razones para odiarte, donde interpretaba a un torpe, entregado y enamorado Cameron.

Heath Ledger y Gordon-Levitt en '10 razones para odiarte' (1999). (Foto: tulisanrifai)

Cosas de marcianos (1996-2001)

Al mismo tiempo se le vio crecer en 3rd Rock from the Sun, serie ganadora de dos Globos de Oro, entre ellos mejor comedia en 1997. Esta ha sido la única ocasión en la que Gordon-Levitt ha tenido un papel protagonista en televisión. Unos cuatro años después de su finalización, la carrera del actor empezó a despegar hasta conseguir la constancia que hoy en día le caracteriza, con una media de tres o cuatro proyectos por año, salvo contadas excepciones.

(Foto: Fanpop)

(500) días juntos (2009)

Esta cinta de Marc Webb, quien ha dirigido después sendas entregas de The Amazing Spider-Man, no supone solo una muestra de la polivalencia de Gordon-Levitt a la hora de adaptarse a distintos géneros, sino también una valiosísima aportación a la historia del cine romántico. Una trama de amor centrada en retratar dos puntos de vista muy opuestos en torno a la misma relación. Fue la segunda colaboración entre el actor y Zooey Deschanel (serie New Girl), tras el drama Manic (2011) que hasta les llevó a explorar juntos el terreno musical.

Origen (2010) y El caballero oscuro: La leyenda renace (2012)

Cuando Christopher Nolan confía en los repartos que elige y se encuentra a gusto trabajando con determinados intérpretes, no tiene reparos en hacerlo notar. Gordon-Levitt debió de encandilarle en Origen, porque dos años después daba vida a un interesante personaje en la última parte de la trilogía El caballero oscuro. Un personaje que cargaba con gran parte de la espectacularidad final de la cinta.

(Foto: ohnotheydidnt)

The Walk (2015)

No son muchos los proyectos que se ven en el horizonte, dejando atrás sonadas películas como Looper (2012), su segunda colaboración con el director Rian Johnson tras Brick (2005); o Lincoln (2012), ganadora de dos premios Oscar. Más modestas han sido 50/50 (2011) y Sin frenos (2012). Ahora, tras el batacazo de Sin City: Una dama por la que matar, llegará The Walk en octubre de este año. Un drama situado en 1974 donde Gordon-Levitt interpreta a Philippe Petit, un equilibrista francés cuyo objetivo es cruzar de una de las Torres Gemelas a la otra.

Ha sido dirigida por Robert Zemeckis, una gallina de los huevos de oro en lo referente a galardones. Fue responsable de Forrest Gump (que le valió el Oscar al Mejor Director) y de todas las entregas de Regreso al futuro, y ha adherido al omnipresente Ben Kingsley a sus filas. Zemeckis promete una experiencia en 3D que podría resultar interesante si se emplea dicha tecnología haciendo justicia a los trepidantes planos que pueden verse en el primer tráiler del filme.