Este año en los Oscar la categoría de actor secundario parece estar casi decidida, no obstante siempre hay lugar para lo sorpresa. El principal favorito para alzarse con el galardón es sin duda J. K. Simmons que lleva arrasando varios meses acaparando premios por su espectacular papel en Whiplash. A continuación os presentamos a los candidatos y las posibilidades que tiene cada uno de alzarse con la estatuilla dorada el 22 de Febrero:
Robert Duvall por 'El juez'
Robert Duvall es auténtica historia en el cine ya, es su séptima nominación y posee ya un premio Oscar como mejor actor principal por la película Tender Mercies, traducida en España como Gracias y Favores (1983). Su candidatura es debido a su gran papel como secundario en la película El juez. Ésta era una película que en principio apuntaba alto antes de su estreno pero se ha ido desinflando y por ello solamente ha conseguido esta nominación gracias al incombustible Robert Duvall.
El actor comenzó su carrera en 1962 con un papel en la gran película Matar a un ruiseñor con Gregory Peck como protagonista. Después de esto, en los años posteriores actúo en varios films y tuvo el lujo de participar en dos de las mejores películas de la historia del cine El padrino I y el Padrino II. En ‘El juez’ interpreta a Joseph Palmer, un magistrado que es acusado de haber cometido un crimen y aunque sus posibilidades de alzarse con el premio son casi nulas es ya un éxito que Duvall haya conseguido su séptima nominación en los premios más importantes del cine americano.
Ethan Hawke, por 'Boyhood'
Ethan Hawke es un auténtico todoterreno del cine y es una persona en la que Linklater ha siempre confiado en muchas de sus películas, por esto no resulta extraño que encarnara al padre de la familia de Boyhood, película dirigida por este director. Aunque Boyhood es muy probable que consiga muchas de las categorías importantes esta la tiene realmente complicada, aunque eso no quita que el papel de Hawke en la película sea magnífico.
Ethan Green Hawke comenzó su carrera en 1988 con un papel en la película El club de los poetas muertos, el éxito alcanzado por esta película provocó que empezaran a lloverle papeles, destacando su participación en la trilogía de Linklater Antes de. Esta es su cuarta nominación, dos como actor de reparto (Training Day y la actual) y otras dos como guionista (Antes del anochecer y Antes del atardecer). En Boyhood interpreta al padre de la familia, un personaje desenfadado que da optimismo a la familia y que añade momentos de humor a la pequeña obra maestra de Linklater. Tiene a su favor que tiene un papel en la que ha sido denominada ‘La película del año’ aún así es muy difícil que se alce con el premio ya que su actuación posee ‘menos complicaciones’ que la de su compañera de reparto Patricia Arquette, aún así el trabajo interpretativo durante los 12 años es encomiable al igual que el del resto del reparto.
Edward Norton, por 'Birdman'
Edward Norton es una persona completamente polifacética ya que es actor, guionista, productor y director de cine. Su salto al cine lo dio en Las dos caras de la verdad junto a Richard Gere, papel por el que fue nominado al Oscar a mejor actor de reparto en 1996. Cabe destacar también su nominación como mejor actor en la película American History X y su participación, junto a Brad Pitt, en la que es considerada por muchos como una de las mejores películas de los últimos años, El club de la lucha de David Fincher(aunque en los Oscar fuera totalmente olvidada).
En Birdman interpreta a Mike Shiner uno de los actores de la obra de teatro que dirige el personaje de Michael Keaton. Shiner intenta robar el protagonismo al verdadero director de la obra gracias a su arrogancia, egocentrismo y un ácido sentido del humor. Norton consigue arrancar grandes carcajadas durante el desarrollo de esta película por su forma improvisada y inesperada de decir barbaridades o hacerlas, forma un gran dueto con Keaton en la película pero como la actuación del protagonista es tan sublime en muchas ocasiones Norton queda eclipsado aunque ralla a un gran nivel de interpretación. No obstante es muy difícil que consiga alzarse con la estatuilla este año y tiene muchísimas menos posibilidades que Keaton, que compite en la categoría de mejor actor principal.
Mark Ruffalo por 'Foxcatcher'
Mark Ruffalo es otro de los candidatos que ha probado varias facetas en el mundo del cine en los últimos años. Es actor, productor, escritor y director de cine y que con esta candidatura logra su segunda nominación después de la que consiguió en 2011 como mejor actor de reparto con Los chicos están bien. Su andadura en el cine comenzó en 1994 con una película de suspense llamada Mirror, Mirror 2: Raven Dance. En su carrera ha participado en todo tipo de géneros, destacando el suspense y últimamente algunas comedias románticas “made in Hollywood”. Incluso ha interpretado a Hulk en Los vengadores y volverá a encarnar a este superhéroe en la segunda parte.
Su segunda nominación le llega por su papel en Foxcatcher, una película que apuntaba muy alto pero que se ha ido desinflando según ha ido desarrollándose la temporada de premios. Mark Ruffalo encarna a Dave Schultz, un luchador hermano de Mark Schultz (Channing Tatum) con el que mantiene una tremenda rivalidad. Aunque Ruffalo no tiene demasiado tiempo durante la película sabe explotar al máximo sus apariciones y brilla en cada escena. Su victoria es complicada, además es el personaje más secundario de los nominados, nada que ver con el tiempo que aparece en pantalla por ejemplo Simmons en Whiplash.
J. K. Simmons por 'Whiplash'
J. K . Simmons es la autentica sensación de la temporada, ha conseguido emocionar a crítica y público con una de las actuaciones más espectaculares de los últimos meses. Él ha conseguido que Terence Fletcher sea ya uno de esos personajes que perduraran en el tiempo por su estilo duro y sus ansias por triunfar y sacar el máximo rendimiento de sus alumnos cueste lo que cueste. Es la primera nominación de Simmons que hasta ahora era conocido por su papel en la serie Oz de la HBO, las apariciones en algunas de las películas de los hermanos Coen y por ser J. Jonah Jameson en las películas de Spiderman.
Con Whiplash ha logrado sin duda el papel de su carrera, el duelo que tiene con Miles Teller durante todo el metraje es emocionante y apasionante, una relación maestro- discípulo controvertida pero que conforma una simbiosis magistral y que será recordada durante mucho tiempo. J. K. Simmons además pone casi toda la carga cómica al film por el característico temperamento de su personaje y su falta de filtros y de delicadeza a la hora de enseñar a sus alumnos. Simmons tiene ya casi la estatuilla dorada en sus manos y solo una de las mayores sorpresas de los últimos años provocaría que no se hiciera con el premio, más que merecido, a mejor actor secundario.