Hace ya cinco meses que se celebró Eurovisión y, sin duda alguna, su ganadora, Conchita Wurst, acaparó todos los focos durante y después del concurso. Sin embargo, en todas las ediciones hay concursantes que llaman la atención del público pese a no quedar en el primer puesto. Es el caso de Softengine.

Cinco jóvenes de entre 17 y 19 años venidos de Finlandia presentaron su canción, Something Better, sorprendiendo a la crítica y al público y ganándose de inmediato unos cuantos seguidores fuera de las fronteras nacionales.

Su estilo se caracteriza por dar a sus canciones una poderosa base musical, componer estribillos potentes, utilizar multitud de instrumentos de los cuales posee gran importancia el teclado, y mezclar sonidos rock y electro.

Nuevo disco esta semana

Aunque la banda cuenta en la actualidad con un componente menos desde el mes pasado (decidió marcharse a estudiar), los chicos continúan avanzando en su camino en el mundo de la música y poco a poco van haciéndose hueco en el panorama internacional. Razón más que probable por la que han decidido cantar en inglés y no en su idioma nativo, el finés.

A principios de verano, en el mes de junio, la banda sacó su primer single oficial desde Something Better, una canción llamada Yellow House. El sencillo alberga lo mejor del rock y del indie pop, tiene un ritmo muy pegadizo y una letra significativa y personal.

Tras todo el verano promocionando el single, por fin se anunció que Softengine vería en el mercado su primer disco completo, llamado We created the world, el 17 de octubre.

A pesar de que las canciones pertenecientes al disco no están todavía disponibles (salvo los singles) sí que circulan por internet canciones que compuso la banda hace tiempo. Algunos de estos títulos son Falling up, Why are you afraid, o Endless waterfall, conocidas ya entre sus fans más fieles.

Como regalo antes de que salga el disco, el tercer single oficial se lanzó el 3 de octubre: The Sirens, una canción melódica con más presencia del electro que de la guitarra. Un último disfrute para los oídos antes de poder escuchar las once pistas que conforman We created the world.