Desde su muerte, debida a una parada cardio-respiratoria, el niño prodigio de Indiana ha recaudado más de 700 millones de dólares, que aún habiéndose usado para saldar sus deudas, las cuales ascendían a otros 117 millones, han dejado 693 millones de dólares a repartir entre su familia.
Otros artistas de alta talla como pueden ser Nino Bravo o Jenny Rivera produjeron grandes cantidades de dinero tras su muerte, pero ninguna se acercó lo más mínimo a la recaudada por el Rey del Pop. El germen de esta desmesurada recaudación fue el documental This Is It en el que se mostraba como se preparaba la gira mundial que el artista tenía planeada para el año de su muerte, dando una visión mucho más humana de la estrella. Tras su lanzamiento se dispararon las ventas de discos y sobre todo de merchandising, camisetas y demás prendas que sus fans incondicionales mostraban con orgullo el día del estreno en cines de todo el mundo.
Sería un gran error achacar los beneficios que el documental produjo a una opulenta inversión de capital, nada más lejos de la realidad. El documental se realizó con fragmentos ya grabados de los ensayos y, para colmo, la familia decidió lanzarlo para hacer frente a la abismal deuda que los caros caprichos de Michael dejaron a la familia Jackson. Lo que nunca hubieran esperado ni sus hijos ni su madre es que recibirían por triplicado lo que el Rey del Pop debía.