Cuando aún estamos asimilando las duras palabras que el intérprete británico Gary Oldman ha vertido contra producciones tan populares como El caballero oscuro, Harry Potter o la reciente 12 años de esclavitud, Cine VAVEL ha decidido desempolvar del baúl de los (malos) recuerdos otros casos de estrellas del celuloide cuya lengua les ha jugado una mala pasada. Cría cuervos...
Woody Allen
Es imposible crear una lista de artistas "rebeldes sin causa" sin mencionar el nombre del neoyorquino Woody Allen. Pese a que guarda en casa cuatro estatuillas doradas, el amor que le profesan los académicos de Hollywood no es recíproco: "No creo que los Oscar tengan ninguna importancia. Si piensas en quienes los han ganado, puedes ver lo insignificantes que son". Palabras que siempre ha respaldado con una sonora ausencia en cada una de las ediciones en las que ha estado nominado. Genio y figura...
Susan Sarandon
En un campo de cultivo donde la cuota de pantalla es cada vez más ancha para remakes, reboots, adaptaciones literarias y demás copias cinematográficas, la actriz de Thelma y Louise no duda en cargar, siempre que se tercie, contra la crisis creativa que atraviesa el sector cinematográfico: "Hollywood es muy poco imaginativo, y lo ha sido por mucho tiempo. Si es algo atípico y de bajo presupuesto, entonces te lo tiran a la basura".
John Landis
Tras un idilio de décadas con su padrino Hollywood, el realizador John Landis recibió un fuerte espaldarazo de la industria cuando se sentó en el banquillo de los acusados por la muerte de un hombre y dos niños, acontecido durante el rodaje de En los límites de la realidad. Como revancha, Landis se despachó a gusto en el pasado Festival Mar de Plata de Argentina: "Los estudios de cine, son ahora subdivisiones de grandes multinacionales. No son compañías, son jodidas naciones. Son gigantes internacionales que no pagan impuestos. Son como piratas. Todo tiene que ver con la desesperación, porque ya no saben cómo llevar a la gente a las salas. Por eso vuelven a utilizar el 3D, fabricando todo tipo de mierda".
Dustin Hoffman
Si existe un ser que se contradice más que habla, ése es Dustin Hoffman. El veterano actor soltó por su boquita una frase que quedaría para la posteridad: "Los Premios de la Academia son obscenos, sucios y no tienen más valor que un concurso de belleza". Lástima que pocos años después enterrara bajo tierra sus ideales para recoger en persona dos estatuillas por Kramer contra Kramer y Rain Man. Lo que hace el poder de lo dorado.
Melanie Griffith
Cuando se ha sido una de las estrellas más deseadas de Hollywood, cuesta asumir el paso del tiempo y el relevo generacional. No obstante, no podemos más que reconocer que Melanie Griffith lleva "más razón que un santo" en todo lo que dijo hace un par de años, en declaraciones a Fox News: "Ahora esto es lo que nunca pensé que sería cuando tenía 20 y 30 años, escuchando a actrices quejarse por no tener trabajo cuando cumplían 50. En esta era y con mi edad, la mayoría de los guiones son una mierda, estúpidos y superficiales". Curioso que a sus compañeros masculinos les ocurra todo lo contrario, cuya vejez parece sumarles atractivo ante la cámara.
Joaquin Phoenix
"No creo en ello. Es una zanahoria, pero es la zanahoria con peor sabor que he probado en toda mi vida. No quiero esa zanahoria. Es algo totalmente subjetivo. Enfrentar a unas personas contra otras... Es la cosa más estúpida de todo el mundo", son solo algunas de las perlas que lanzó el protagonista de Her a los miembros de la Academia de Hollywood, poco después de conocer su candidatura por The Master. Finalmente no se llevó el galardón, pero desfiló con la mejor de sus sonrisas por la alfombra roja. Cuidado con lo que dices, Phoenix.
Sean Connery
Tan solo un año después de decir adiós a su carrera como actor en 2005, Sean Connery se sinceró (aunque más de la cuenta de lo que hubiesen querido algunos) en Festival de Cine de Edimburgo. En el marco de la celebración de su homenaje, Sir Connery aprovechó la ocasión para lanzar dardos envenenados hacia sus dos últimos proyectos delante de las cámaras: La liga de los caballeros extraordinarios y Los vengadores. De la primera película llegó a calificar a su director, Stephen Norrington, de "loco", mientras que de la segunda explicó cuales eran las razones que habían causado el tira y afloja que protagonizó junto al productor, Jerry Weintraub: "todas sus ideas eran estúpidas".
James Franco
Es junto a Shia LaBeouf y Joaquin Phoenix, uno de los chicos malos de Hollywood. Condición que no duda en sostener a través de diferentes polémicas que le han situado en el ojo del huracán mediático. A la ya conocida foto de Instagram en la que aparecía ligero de ropa, recordamos aquella otra en la que el intérprete de Oz, un mundo de fantasía renegó de Hollywood y de su visión errónea de la homosexualidad, concretamente la que Shame, de Steve McQueen, aportó a los espectadores: "Esa escena donde está en su punto más bajo y quiere tener sexo y va a un gay club… Pintan el lugar como el último nivel del infierno… La escena retrotrae las horribles representaciones de los gays en los años 70, donde el club gay debe significar que todo es oscuro y depravado. Luego recibe sexo oral de… ¡oh no¡ ¡un hombre! El horror”.
Terry Gilliam
"Creo que Hollywood ha logrado todo lo que siempre han soñado. El público ahora parece ser muy tonto, me refiero a que están viendo la misma película una y otra vez. Pagan dinero para ver la misma película. Ahora, se podría argumentar, eso es porque les hace sentir cómodos". El ex de los Monty Pyton es, cuando menos, peculiar, de eso no cabe la menor duda, pero hay que tener mucho valor para meterse con el mismísimo Rey Midas de Hollywood sin que te tiemble la voz. Afortunadamente, la sangre derramada por sus declaraciones, que tachaban de "simplista" y "deshonesta" la filmografía de Steven Spielberg, no llegó al río.
Meryl Streep
Si lanzar pullas contra el gigante hollywoodiense, es como tirar piedras sobre el propio tejado, hacerlo contra un símbolo de ese sistema es jugar con fuego. Ahora bien, solo puedes evitar no quemarte si eres la tres veces ganadoras de un Oscar y uno de los iconos más respetados de toda una generación de intérpretes. Hablamos de Meryl Streep, quien no dudó en poner en tela de juicio los buenos valores del creador de la factoría de Mickey Mouse, Walt Disney: "Sin ninguna duda Walt Disney llevó la alegría a miles de millones de personas, pero era tal vez, o en algún momento tuvo inclinaciones racistas. Él formó y apoyó a un lobby industrial antisemita y fue, sin duda alguna, un misógino".