A estas alturas, casi todos los gremios cinematográficos han aportado su veredicto sobre la temporada de premios. El pasado sábado habló uno de los pocos que quedaba por hacerlo, el Sindicato de Directores, el gremio de cineastas más importante de América que como cada año, desde hace 66, destaca el buen hacer de uno de sus compañeros de profesión. En esta ocasión, el realizador laureado fue el mexicano Alfonso Cuarón, que se hizo con el Director Guild Awards 2014 por su labor tras la cámara en la cinta de ciencia ficción Gravity. "Es realmente un honor, y me siento muy honrado por ser reconocido por mis compañeros", destacó el primer hispano en levantar este galardón.
Con el DGA, Cuarón suma un nuevo reconocimiento en su recién estrenado palmarés, en el que ya se encuentran, entre otros, un Critic's Choice Awards o un Globo de Oro. Y lo hace imponiéndose a nombres de peso como Steve McQueen (12 años de esclavitud), Martin Scorsese (El lobo de Wall Street), David O. Russell (La gran estafa americana), David O. Russell (La gran estafa americana) y Paul Greengrass (Capitán Phillips).
El triunfador de la pasada edición fue Ben Affleck por Argo, cineasta que levantó el premio sin contar con el beneplácito de la Academia de Hollywood. En esta ocasión, Cuarón sí opta a la estatuilla dorada como mejor director, un galardón cada vez más cerca de la mano del mexicano siempre y cuando el británico Steve McQueen y su 12 años de esclavitud se lo permitan. Recordar que el ganador del Oscar a Mejor Director casi siempre va vinculado al de Mejor Película, y es precisamente en este apartado donde la película de esclavos de McQueen, gran favorita, le saca ventaja a la aventura espacial de Cuarón.
No obstante, no todo está perdido. Desde que el Sindicato de Directores comenzó a dar sus premios, allá por 1948, tan solo en siete ocasiones su preferido no ha repetido hazaña en los premios de la Academia. Un punto más a favor de la victoria de Cuarón que también es el gran favorito para alzarse con el próximo BAFTA de la Academia Británica.
En el apartado televisivo de los DGA, el gato al agua se lo llevó Vince Gilligan, creador de la serie de televisión Breaking Bad. Steven Soderbergh hizo lo propio en la categoría de mejor director de película para televisión o miniserie por Behind the Candelabra.