Cuenta la leyenda que fue una confusión de Paddy McAloon lo que dio nombre a su grupo al interpretar Jackson, el tema de Nancy Sinatra y Lee Hazelwood. El jovencísimo Paddy decidió cambiar ‘We got married in a fever, hotter and pepper sprout’ por ‘hotter tan a prefab sprout’, algo que podemos traducir, más o menos, por ‘brote prefabricado’. Un término que en el contexto de la industria musical de Inglaterra en los 70’s, no puede más que evocarnos a todos esos grupos que siguiendo la estela que los Beatles habían dibujado, se embutían en trajes de tres botones y actuaban emulando a los cuatro de Liverpool. Este error de pronunciación, gustó tanto a su casa discográfica que tuvo que entrar a formar parte de la historia del grupo. ¿Y qué mejor forma que escogerlo como nombre del grupo?

Un nombre es sinónimo de firma, diferencia y, sobre todo, es una manera de respaldar un producto. Desde el genial tema de presentación en 1982 'Lions In My Own Garden: Exit Someone', Prefab Sprout ha ido consolidándose como marca y Paddy McAloon como uno de los mejores compositores de su generación. Él, su hermano Martin McAloon (guitarrista del grupo) y Wendy Smith consiguieron apuntarse varios tantos en los 90’s como con The King of Rock 'n 'Roll o Cars and Girls.

A pesar de haber logrado situar ocho de sus discos en las listas de álbumes británicos y cosechar un éxito razonable en Estados Unidos, la banda de Newcastel no ha conseguido ganarse el favor del gran público. Lo que sí ha logrado ha sido un lugar en la memoria de la crítica y de unos fans más que fieles a un estilo fresco, la clase de estilo que, si permite el símil, puede equipararse al aspecto desenfadado que logran tener algunos tras pasarse dos horas arreglándose ante el espejo.

Esa espontaneidad trabajada, ha hecho de Prefab Sprout una marca para recordar. Su último trabajo, Crimson/Red, está impregnado de ella. Paddy, no solo ha actuado como compositor sino que se ha encargado del disco, como solo un genio puede hacer, ocupándose tanto de la voz como de los instrumentos, y sin la ayuda de ningún productor.

Es decir, cuando escuchamos Crimson/Red, estamos escuchando el sonido recién recogido en el estudio casero de Paddy y lanzado al mercado para nuestro disfrute. Las letras, como siempre, con más de una lectura, van revelando historias con matices semi-personales, como Mysterious, (tema dedicado al creador de Lay Lady Lay, el primer disco que se compró) o como The Best Jewl Thief In The World, el single promocional del disco.

Puede que Paddy haya, o no, pensado en sí mismo a la hora de componer este último tema, pero desde luego 'Look your legend drow, the rooftops are for dreamers'' parece estar acorde no sólo con este último trabajo, sino con toda su trayectoria.